La importancia de imprimir nuestras fotos

14/08/2020 Carlos PermuyCarlos Permuy 1148

Tengo la gran suerte de estar rodeado de amigos que tienen una vasta cultura fotográfica y, además, en diferentes campos: documental, estudio, paisaje, retrato, formación e impresión.

El destino de las fotografías

Uno de ellos es un gran formador y siempre me había dicho que "El destino final de una fotografía es tenerla en papel, no en una pantalla. El papel tiene la ventaja de potenciar tanto lo bueno como lo malo de una fotografía. Si una foto es buena, impresa será mejor y si es mala, impresa será peor lo cual también es bueno porque te ayuda aprendiendo a conocer lo que no has de hacer la próxima vez". 

El otro, es un gran impresor de profesión y tenemos la grandísima suerte de tenerlo como socio en nuestro fotoclub local. Tanto es así que es uno de los pocos de España con el certificado Digigraphie de Epson, lo que le valida para realizar impresiones profesionales de alta calidad.

Un día me dijo una frase que me hizo pensar "Una foto digital no existe, no es más que un conjunto de ceros y unos, no una imagen. Para que exista, hay que imprimirla". Me pareció una frase fantástica y totalmente cierta, incluso lapidaria diría yo, lo que me animó a empezar a imprimir más allá de las que imprimía (también con su ayuda) cuando tenía una exposición. 

Plotter profesional Plotter profesional

Imprimiendo, que es gerundio

Para empezar, algunos de los bailarines de la actuación de este mismo mes me pidieron algunas fotos y yo les aconsejé que las imprimieran también y que yo (más bien mi colega impresor) me encargaría de imprimirlas y hacérselas llegar. Y así lo hice. Ayer mismo quedé con él y me dirigí al fotoclub para imprimir las copias de los bailarines, de la organizadora del evento y de la directora del teatro.

A pesar de que ya lo había visto otras veces, me parece mágica la parte de ver tu foto en un monitor calibrado, reprocesar lo que hay que reprocesar para que lo que se imprima sea exactamente lo que ves por pantalla y darle a los negros un tono cálido, neutro o frío, si hablamos de fotos en blanco y negro. Me parece una parte artesanal de la fotografía que todos deberíamos experimentar de vez en cuando.

Es más, ya quedé con mi amigo que iría imprimiendo todas las fotos de mis proyectos acabados (los podéis ver aquí) en tamaño más reducido (A3) para tener el "objeto físico" de la fotografía y que esta realmente exista fuera del mundo virtual. Además, es mucho mejor comentarlas con la gente que comparte tu afición cuando las tienes físicamente en las manos que delante de un ordenador. 

Damián en plena faena Damián en plena faena

¡Atreveos!

Por ello, os animo a que lo probéis. Mirad si en vuestro fotoclub local tienen una impresora de calidad y, si no, buscad cualquier empresa de impresión donde os las puedan imprimir con un mínimo de garantías. Es muy económico y os aseguro que la satisfacción es enorme. Mucho más que verla en una pantalla del ordenador.

Y, además, ¡colaboraréis a que las fotos realmente existan!

Hasta la semana que viene.

Un abrazo a todos.

La belleza de la foto impresa La belleza de la foto impresa

P.D. Perdonad la calidad de las fotos, ya sé que es imperdonable en un blog de fotografía pero ayer mismo ni pensaba en escribiros estas líneas y al ir sólo a imprimir no me llevé la cámara, por lo que las fotos son de móvil. Creo que el mensaje, no obstanta, bien merece el sacrificio. En las fotos podéis ver a Damián, el impresor, realizando un trabajo impecable en la impresión de mis fotos.

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